Walter Delgatti Netto, conocido como el “hacker de Araraquara”, anunció desde la cárcel de Tremembé (también conocida como “la cárcel de los famosos”), en el estado de São Paulo, su intención de lanzar una empresa de apuestas deportivas junto al ex futbolista Robinho, según informó O Globo. Ambos cumplen condenas en el complejo penitenciario y, aunque se encuentran en celdas separadas, mantienen contacto durante las horas de esparcimiento en el patio.
La propuesta de emprender en el rubro de las apuestas surgió durante conversaciones entre Delgatti y Robinho, según declaraciones del propio hacker a su abogado y al personal penitenciario. La idea es forjar una sociedad que combine el reconocimiento mediático del ex delantero de la selección brasileña, Real Madrid y Santos, con el conocimiento tecnológico del especialista en informática. El proyecto espera materializarse solo si ambos obtienen una reducción de su pena que les permita salir en libertad o en régimen semiabierto.
Walter Delgatti cumple una condena de 8 años y 3 meses, dictada por el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil. Su nombre cobró notoriedad en 2019, cuando accedió a cuentas de Telegram de fiscales vinculados a la Operación Lava Jato y del entonces juez Sergio Moro. El hacker filtró mensajes que provocaron cuestionamientos sobre el procedimiento judicial en ese caso, generando impacto político y mediático a nivel nacional. Fue protagonista de nuevo al falsificar una orden de arresto contra el juez del Supremo Alexandre de Moraes, hecho por el cual también fue sentenciada la diputada federal Carla Zambelli, actualmente prófuga.
Por su parte, Robinho está cumpliendo una pena de nueve años de prisión, luego de que un tribunal italiano lo condenara por violación. El ex jugador, que brilló en equipos como Santos, Real Madrid y AC Milan, permanece en Tremembé mientras aguarda decisiones judiciales respecto a su cambio de régimen penitenciario. Sería indispensable para el desarrollo del proyecto empresarial que el ex futbolista obtuviera una progresión de su condena o una revocación de la sentencia dictada en Europa.
Durante su estadía en el penal, Robinho ha registrado altibajos emocionales, según relataron funcionarios de la prisión. Después de llegar a Tremembé, el ex atleta lideró un equipo de fútbol entre los internos y mantuvo esa rutina durante sus primeros meses privado de libertad. Sin embargo, sus apariciones en la cancha han disminuido. Se atribuye parte de esta caída anímica a la ausencia de su hijo mayor, Robson Júnior, de 17 años, quien debutó recientemente en el primer equipo del Santos, siguiendo la tradición familiar. Cuando recibe visitas de su hijo, Robinho suele mostrar signos de alegría y lo presenta a otros reclusos.
El entorno familiar de Robinho se mantiene cercano durante su reclusión. Su esposa y sus tres hijos lo visitan frecuentemente y, en fechas recientes, el ex jugador obtuvo autorización para recibir a su pastor privado en el centro ecuménico del penal.
En la actualidad, Robinho aún busca acceder a un régimen de detención menos restrictivo. Sus recursos presentados ante el Superior Tribunal de Justicia (STJ), con el objetivo de anular la sentencia italiana, han sido rechazados por las autoridades judiciales brasileñas.
La propuesta empresarial conjunta, según los implicados, pretende aprovechar la experiencia en ciberseguridad y desarrollo de plataformas digitales de Delgatti, junto a la imagen pública de Robinho, como fórmula para ingresar al competitivo mercado de apuestas deportivas una vez recuperen su libertad. Por ahora, el futuro de la iniciativa depende de las resoluciones judiciales pendientes y de la posibilidad de que ambos dejen atrás sus actuales restricciones penitenciarias, remarcó el mencionado medio.