“Es mejor morir de pie que vivir arrodillado”.
Con esa cita de Ernesto “Che” Guevara, Marcelo Saracchi eligiĂł responder pĂşblicamente a la explicaciĂłn de Miguel Russo sobre su exclusiĂłn del plantel profesional de Boca Juniors. La frase, publicada en sus redes sociales, no solo apuntĂł al entrenador, sino que tambiĂ©n dejĂł entrever una crĂtica a la estructura de poder dentro del club, en un momento en el que la tensiĂłn interna se ha vuelto palpable. La reacciĂłn del lateral uruguayo, uno de los tres futbolistas apartados del grupo principal, intensificĂł el clima de conflicto en el predio de Boca, donde la relaciĂłn entre cuerpo tĂ©cnico, jugadores y dirigencia atraviesa una etapa de máxima fricciĂłn.
La controversia se desatĂł despuĂ©s de que Russo, consultado por la situaciĂłn de Saracchi, Marcos Rojo y Cristian Lema, atribuyera la decisiĂłn de marginarlos a una determinaciĂłn institucional: “Fue una decisiĂłn del club”, afirmĂł el tĂ©cnico en diálogo con TyC Spors. Esta declaraciĂłn marcĂł un giro respecto a la percepciĂłn generalizada, que hasta ese momento consideraba que la exclusiĂłn respondĂa a una elecciĂłn personal del entrenador. La respuesta de Saracchi, recurriendo a una consigna histĂłrica de rebeldĂa, fue interpretada como un cuestionamiento directo a la autoridad de Russo y, de manera implĂcita, a la influencia de la dirigencia en las decisiones deportivas.
El caso de Saracchi presenta particularidades que lo distinguen de los otros dos futbolistas en la misma situaciĂłn. Aunque Rojo y Lema tambiĂ©n entrenan separados del plantel principal, el lateral uruguayo enfrenta un escenario contractual más complejo: su vĂnculo con Boca se extiende hasta diciembre de 2027, lo que implica que aĂşn le resta un año y medio de contrato. Esta circunstancia complica cualquier salida negociada, tanto para el jugador como para el club.
En ese contexto, el representante de Saracchi propuso una rescisiĂłn anticipada que contemplaba el pago de 12 meses de los 30 que restan de contrato, pero la dirigencia de Boca rechazĂł esa alternativa. Tampoco prosperĂł la posibilidad de un traspaso a Independiente, ya que, aunque las partes habĂan acordado un prĂ©stamo, no lograron consensuar los tĂ©rminos de la opciĂłn de compra, lo que frustrĂł la operaciĂłn.
SegĂşn dejaron entrever desde Boca Juniors, el lateral tenĂa acordado un prĂ©stamo con cargo y opciĂłn de compra para pasar al Rojo, pero la comunicaciĂłn terminĂł de manera abrupta, situaciĂłn que generĂł un profundo malestar en el club xeneize que lo vio como una estrategia para bajarle el precio a la ficha de Facundo Zabala, refuerzo proveniente de Olimpia. AsĂ, el futbolista permanece en una suerte de limbo profesional, apartado del grupo y sin una salida clara a la vista.
La reacción pública de Saracchi, sumada a la postura de Russo y la negativa de la dirigencia a facilitar su desvinculación, ha profundizado la tensión en el seno de Boca. La situación de los “borrados” se ha convertido en un foco de conflicto que amenaza con desestabilizar aún más el ambiente interno, ya convulsionado tras la reciente derrota ante Huracán.