El Real Madrid afronta una revolución silenciosa en su estructura deportiva, motivada por la sucesión de lesiones que frenó el rendimiento del primer equipo durante las últimas dos temporadas. Más de 50 lesiones, en su mayoría de origen muscular, obligaron al club a repensar su metodología de trabajo e invertir en innovación tecnológica aplicada a la salud y al rendimiento físico de sus futbolistas.
En este contexto, la dirección deportiva encabezada por Florentino Pérez y la llegada de Xabi Alonso como entrenador marcan el inicio de un nuevo ciclo. Junto a él, se unen al Real Madrid dos perfiles clave: Javier Arnáiz, exdirector de rendimiento de la Federación Mexicana de Fútbol y doctor en Ciencias del Deporte, e Ismael Fernández, doctor en la misma disciplina y CEO y cofundador de ThermoHuman. Su incorporación no solo implica un refuerzo del área de preparación física, sino también la adopción de una metodología avanzada que ya se aplica en otras secciones del club, como el equipo femenino y el conjunto de baloncesto.
La principal novedad es la integración de la tecnología desarrollada por ThermoHuman. Esta empresa se especializa en la termografía infrarroja y en el análisis automático de la temperatura corporal como herramienta de prevención, diagnóstico precoz y seguimiento de lesiones. La termografía infrarroja permite, a través de cámaras térmicas y un sofisticado software de inteligencia artificial, detectar asimetrías en la temperatura de regiones corporales simétricas, lo que facilita la identificación temprana de sobrecargas, inflamaciones y otros indicadores asociados a lesiones. Así, el Real Madrid busca minimizar los tiempos de baja y anticiparse a los problemas físicos antes de que obliguen a los futbolistas a parar.
El funcionamiento de ThermoHuman se sustenta en un procedimiento ágil y automatizado. El sistema dispone de una extensa base de datos, con más de 350.000 imágenes térmicas y usuarios repartidos en 46 países. El escaneo corporal se realiza en apenas 30 segundos, mediante un sistema Plug and Play. La cámara térmica, conectada al software, captura la imagen del cuerpo y genera, en tiempo real, informes personalizados que localizan posibles desequilibrios térmicos. A partir de allí, los algoritmos de visión artificial segmentan el cuerpo en más de 100 regiones ajustadas a la anatomía individual, mientras redes neuronales y alarmas inteligentes procesan los datos para ofrecer métricas interpretables y útiles para el equipo médico y técnico.
Esta información permite no solo identificar el riesgo de lesión en un jugador antes de que aparezcan síntomas visibles, sino también monitorizar la recuperación tras un diagnóstico y planificar el regreso a la actividad deportiva de forma individualizada y segura. La herramienta digitaliza y exporta estos datos en distintos formatos, facilitando la labor de integración con otras plataformas de control médico y de rendimiento.
El método ThermoHuman no es completamente desconocido en la élite del fútbol español. El Girona ya lo utiliza actualmente y el Atlético de Madrid fue el pionero en su adopción durante la temporada 2017/18. Sin embargo, la decisión del Real Madrid de incorporarlo al primer equipo masculino responde a la magnitud del desafío físico al que se enfrenta la plantilla tras una temporada marcada por continuos contratiempos físicos.
Durante la última campaña, el club emitió más de 30 partes médicos relacionados con problemas musculares, lo que afectó la competitividad y la rotación del plantel. Con la llegada de Arnáiz y Fernández, la idea es potenciar el trabajo multidisciplinario en el área de la preparación física y el tratamiento personalizado de los jugadores, buscando recuperar ese perfil dominante en los segundos tiempos, característico del Real Madrid más exitoso de los últimos años.
El sistema ThermoHuman también se presenta como una respuesta directa a la incertidumbre que generó la gestión de lesiones durante la etapa anterior, especialmente en la era de Carlo Ancelotti y bajo la responsabilidad de Antonio Pintus como preparador físico. Ahora, la apuesta se dirige a una metodología que combine ciencia, datos y tecnología para salvaguardar la salud de los futbolistas y reducir la incidencia de lesiones.
El club pone el foco en el retorno preventivo, la optimización de la fatiga y la mejora del rendimiento, con la esperanza de que el trabajo coordinado entre el equipo técnico, el departamento médico y los especialistas en rendimiento marque la diferencia en el día a día.
