Los violentos sucesos en el Estadio Libertadores de AmĂ©rica de Avellaneda que decantaron en la cancelaciĂłn de la llave de octavos de final entre Independiente y Universidad de Chile todavĂa no tienen detenidos en la causa. Durante los nueve allanamientos que se impulsaron en la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad AutĂłnoma de Buenos Aires en la madrugada de este jueves, las fuerzas de seguridad no lograron hallar a los ocho barras imputados por distintas causas.
En ese marco, el ministro de seguridad de la provincia de Buenos Aires, Javier Alonso, dio una entrevista con el programa De acá en más, que se emite por Urbana Play, y expuso su mirada sobre estos últimos procedimientos pero también sobre los violentos hechos que se desarrollaron el pasado miércoles 20 de agosto en el estadio del Rojo.
“En la madrugada de hoy nos libraron ocho Ăłrdenes de detenciĂłn que ya se realizaron los allanamientos. Hace minutos terminaron los allanamientos, encontramos prendas similares a las que se usaron ese dĂa y encontramos armas de fuego. Las personas no estaban, algo que nosotros esperábamos que no estuvieran porque fue tan pĂşblico todo que era notorio que Ăbamos a ir a buscarlos. Todos se vieron en la tele e imagino que cuando fueron al barrio habrán presumido tambiĂ©n porque toda esa cultura de la violencia…”, indicĂł el funcionario sobre el procedimiento. “Lo importante es que hay ocho barras que están identificados, que tienen pedido de captura, que están siendo imputados por intento de homicidio. No tenĂan derecho de admisiĂłn”, agregĂł.
La autoridad de seguridad a nivel provincia de Buenos Aires afirmĂł que hubo más de 100 detenidos de los hinchas chilenos –fueron liberados horas despuĂ©s–, aunque aclarĂł que la identificaciĂłn sobre su rol de barras se dio por la televisiĂłn chilena: el programa Teletrece expuso con nombre y apellido a varios hinchas violentos de la U de Chile que tienen derecho de admisiĂłn en su paĂs y estuvieron en la popular del Libertadores de AmĂ©rica. “Los de Chile, en la televisiĂłn chilena, dicen que pudieron identificar barras que estaban colgados de la baranda, que en Chile no pueden ingresar a los estadios”, reconociĂł.
Hay que tener en cuenta que, dĂas antes, la barra de la U de Chile habĂa quedado en el foco por lanzar pirotecnia al campo de juego en un duelo contra Audax por el torneo local, pero además la Conmebol emitiĂł dos sanciones previas a ese club a lo largo de este año por distintas contravenciones en juegos contra GuaranĂ de Paraguay y Botafogo de Brasil.
Alonso planteó que los derechos de admisión a los barras del Rojo emitidos previamente lograron dejar fuera de la cancha a varios violentos: “Hace tres años hubo un enfrentamiento a balazos en Mitre entre dos facciones de la barra. Todos ellos tienen derecho de admisión y no pueden entrar. Toda esa gente, cuando hay un partido, se junta en restaurantes de la zona, alguna parrilla, y ellos vinieron a querer entrar a la cancha cuando empezaron los disturbios y nosotros los frenamos para que no lleguen”.
En esa lĂnea, graficĂł una lĂnea de tiempo desde el inicio de los conflictos hasta el final. SegĂşn el ministro, los primeros registros de agresiĂłn por parte de los fanáticos chilenos se dieron cerca de las 20hs, a una hora y media del arranque del partido. El tema terminĂł casi tres horas más tarde con el violento ingreso de los barras argentinos. Durante ese lapso, hubo una continua agresiĂłn de los barras chilenos a los simpatizantes del Rojo ubicados en la Tribuna Pavoni Baja sin intervenciĂłn de ninguna fuerza de seguridad.
“Yo creo que esto no pasó porque entraron con una manopla, puede ser que el cacheo haya sido deficitario, no voy a discutir lo que aparece. Puede ser que hayan pasado una manopla, o dos manoplas. Puede ser que haya pasado eso en 60 mil personas que entraron al estadio. No fue esa la causa de la situación”, defendió el operativo policial en los ingresos.
Al mismo tiempo, armĂł la cronologĂa: “El partido empieza 21:30 y a las 20:10 pasa algo, que no sabemos bien quĂ© es, que empieza a incrementar la violencia de una manera inusitada por parte de la parcialidad de Chile. Eso se ve en las cámaras. DespuĂ©s que pasa eso, la barra de los que no pueden entrar, quiere entrar al estadio y la PolicĂa los repele. El estadio tiene muchos accesos, la PolicĂa los va alejando de los distintos accesos. La barra de la tribuna norte quiere salir del estadio y la PolicĂa no los deja salir”.
Y continuĂł: “Cuando termina el primer tiempo, va el Aprevide, a las 22:16, y le dice al delegado de Conmebol que tiene que suspender el partido. 22:19 se lo dice el jefe de PolicĂa. A las 22:31 y a las 22:35, por indicaciĂłn de la PolicĂa, desconociendo a la Conmebol, por la voz del estadio, se le pide a la parcialidad chilena que abandone la tribuna, que el partido estaba suspendido. 22:39 empieza el segundo tiempo. DespuĂ©s, a las 23, la tribuna queda vacĂa. La barra de Independiente ingresa a las 23:19 y un grupo de 50 hinchas de Chile, que se quedaron en el bajo tribuna, y que se ve que están preparándose para combatir con los hinchas de Independiente que estaban dispuestos a entrar. Cuando irrumpen los de Independiente, hay unos 30 hinchas que bajan por la escalera y hay 20 que quedan dando vueltas en la tribuna. Algunos salen para afuera, otros se quedan en la tribuna y ahĂ se dan las agresiones que vimos todos”.
El funcionario aclaró que el “club tiene que dar explicaciones” y enfocó su planteo en el rol de la seguridad privada que estaba dentro del recinto deportivo: “Estaban a cargo de toda la seguridad interna del estadio con la seguridad privada, una seguridad privada que no se vio en la tribuna. Hay cuestiones graves respecto a la seguridad privada. Después, hay imágenes de seguridad privada donde abren un portón donde facilitan el acceso de barras”.
Alonso reconociĂł que los barras chilenos ingresaron a un cuarto de limpieza para tomar los palos de los “escobillones y secadores”, pero aclarĂł que lo más grave fue los proyectiles que generaron rompiendo las instalaciones: “Hubo muchos elementos que tomaron destruyendo el estadio. Se arrancaron perfiles de hierro de la escalera de hormigĂłn. Esas especies de facas que se veĂan eran todos perfiles de hierro que arrancaron de la infraestructura del estadio. Lo mismo del puesto del buffet que estaba debajo de la escalera. Eso fue un desastre”.
El operativo, destacĂł el funcionario, “preservĂł a 2600″ hinchas chilenos y apuntĂł contra los “200″ simpatizantes de la U de Chile que tuvieron un accionar violento a lo largo de la jornada. “La PolicĂa detuvo a 111 violentos. En muchos casos combatiendo en las escaleras con los violentos que bajaban, hubo policĂas heridos. Hay toda una parte que no se vio y que ocurrió”, relatĂł.
Finalmente, asegurĂł que no hubo denuncias formales sobre los supuestos abusos que cometieron los hinchas de la U contra empleadas de la entidad: “Hubo muchos rumores, mitos. Fuimos a buscar a esa señora, la llevamos a la ComisarĂa y la persona declarĂł que no le pasĂł nada. Revisamos las imágenes y nunca aparece, en ninguna imagen, el empleado del kiosco agredido ni agentes de seguridad agredidos. Tampoco hubo agresiones en el colegio de Independiente al otro dĂa”.